El sector óptico empieza a dejar atrás los tres duros años de pandemia por el Covid. Ya quedan casi en el olvido las restricciones de movilidad que perjudicaron las visitas a los centros ópticos de toda España y el desarrollo profesional de los especialistas. Puede afirmarse, a tenor de los datos económicos que ha recopilado el Instituto Nacional de Estadística (INE), que la óptica en el conjunto de las comunidades autónomas ha recuperado buena parte del terreno que perdió en 2020, el primer año de inicio oficial de la pandemia. Sí, precisamente en un sector que junto con el sector sanitario español en su conjunto sufrió la presión por el virus también esta tensión sanitaria infligió un duro golpe en la cuenta de resultados y en la facturación de las empresas del sector óptico español.

De hecho, la cifra de negocio global del negocio de las ópticas y sus distintas especialidades descendió un 18% durante el ejercicio 2020 hasta situarse en 1.525,5 millones de euros. Lo que significa que la red de distribución dejó de ingresar 336 millones de euros respecto a 2019.

El dato está plasmado en el `Libro Blanco de la Visión en España 2022´, editado por la Fedao, el cual deja ver el repunte que ha registrado el sector en 2021 y las buenas perspectivas que existen en la actualidad, a pesar de los nubarrones que aparecen en forma de inflación y geopolítica y de una coyuntura internacional todavía marcada en este primer trimestre de 2023 por la guerra de Rusia en Ucrania.

El aumento del número de ópticos optometristas, de colegiados por cada 100.000 habitantes y la facturación del negocio son tres factores que comparando los ejercicios de 2021 y 2020 permiten afirmar que la pandemia ha quedado atrás.

A la espera de los resultados de la estadística para el ejercicio de 2022, cabe ahora analizar a nivel global español y, en particular en las comunidades de Madrid, Castilla y León y Extremadura cómo ha sido la evolución de estas y otras magnitudes del sector tras la Covid.

Una visión global

A nivel global español en 2021, el sector de la óptica alcanzó una cifra de negocio de 1.836,2 millones de euros, un 20,3% más en términos interanuales. Y, aunque los ingresos se mantuvieron ligeramente por debajo de los obtenidos en 2019 (1.861,8 millones de euros), el salto adelante es más que evidente.

El Libro Blanco del Sector Óptico en España refleja que las lentes oftálmicas son la unidad de negocio que más ha crecido, al registrar un alza del 16,4% frente a 2020, hasta alcanzar los 130 millones de euros. El 33,9% de las lentes vendidas en España es progresiva; el 65,7% es monofocal, mientras que el 0,5% en bifocal.

Las gafas graduadas, por su parte, han generado a la distribución de óptica una cifra de negocio de 360 millones de euros, lo que significa un crecimiento interanual del 21,1%. La tendencia tiene una relación directa con el aumento en la venta de unidades, que superó el techo de los 4,1 millones, frente a los 3,5 millones de 2020, según los datos hechos públicos por el Libro Blanco del sector.

En este contexto, los datos del Libro Blanco reflejan que el precio medio de las monturas para gafas se ha incrementado en 3,44 euros en 2021, aunque siguen por debajo de los tiempos de antes de la pandemia (88,07 euros).

De hecho, Uno de los segmentos de negocio más prometedores para el sector es el de las lentes de contacto que, en la actualidad, gozan de mejor salud que nunca.

El Libro Blanco se refiere a las lentillas como un segmento que crece año tras año, gracias a la incorporación de nuevos usuarios. Así, las lentes de contacto generaron un volumen de negocio de 256 millones de euros en 2021, lo que representa un incremento del 26,62% frente a 2020.

Por otra parte y para complementar los datos del Libro Blanco, en opinión del Observatorio Sectorial DBK de INFORMA (filial de Cesce), uno de los proveedores de Información Comercial, Financiera, Sectorial y de Marketing en España y Portugal, el valor de las ventas de los establecimientos minoristas de productos ópticos registró un notable crecimiento en 2021.

Esta progresión positiva estuvo motivada por la progresiva eliminación de las medidas de distanciamiento social impuestas en 2020 para hacer frente a la crisis sanitaria y por el repunte del consumo privado.

De este modo, el valor del mercado se situó en 2.500 millones de euros, un 13,6% más que en 2020, año en el que había caído un 16%.

Las cadenas de ópticas, considerando como tales las redes que agrupan bajo una misma enseña de marca a varios establecimientos, ya estén asociadas o no a grupos de compra -tal y como se refleja en la estadística-, registraron un aumento del 15% en sus ingresos, lo que supuso alcanzar la cifra de 1.230 millones de euros.

Por su parte, las ópticas asociadas a grupos de compra, que habían resistido mejor a la caída del mercado en 2020 gracias, en parte, al aumento del número de establecimientos asociados a este tipo de organizaciones, registraron en 2021 un crecimiento del 6,7% en las ventas, las cuales se situaron en 1.360 millones de euros.

Crecimientos en todos los productos

Todos los tipos de producto experimentaron fuertes crecimientos, destacando especialmente el segmento de gafas de sol (+32,6% en 2021), muy penalizado en 2020 por la caída de la demanda ante el retroceso del consumo privado.

El resto de productos contabilizaron aumentos del 10-15%. El segmento de lentes oftálmicas, con un valor de 1.155 millones de euros, representó el 46% del mercado total.

El sector óptico español en su conjunto presenta buenas perspectivas para los próximos años ante la creciente necesidad de la población de elementos compensadores de la visión. No obstante, a corto plazo el ritmo de crecimiento de las ventas se verá limitado por el progresivo deterioro de la coyuntura económica, esperándose tasas de crecimiento situadas en el entorno del 3-4% en el bienio 2022-2023.

La oferta de establecimientos de óptica estaba compuesta a finales de 2021 por unas 9.800 ópticas, cifra que registra una tendencia a la baja desde marzo de 2020, impactada por el descenso de la demanda y la pérdida de rentabilidad derivados de la crisis sanitaria.

Los principales grupos de compra y cadenas mantienen una posición destacada en el sector, reuniendo los cinco primeros una cuota conjunta de mercado del 46,8%, mientras que los diez primeros alcanzaron el 66,6%.

Madrid

En cuanto a la Comunidad de Madrid, el año 2021 obtuvo una facturación de 255,23 millones de euros, un aumento de unos 40 millones respecto de 2020, cuando se lograron 212 millones de euros. Esta diferencia al alza demuestra la recuperación en cuanto a la cifra de negocio, según los datos recopilados por el INE.

En cuanto a la facturación según establecimiento, en la Comunidad de Madrid se facturaron 123 millones por grupos de compra; 99 millones por cadenas y franquicias y más de 31 millones de euros por otros negocios vinculados al sector óptico considerados como independientes. En cuanto al número de colegiados en esta comunidad, en 2021 ascendió a 3.333 por un total de 1.372 ópticas.El número de ópticos optometristas se vio incrementado entre 2021 y 2020 pasando de los 2.939 a los 3.333.

Castilla y León

En Castilla y León las magnitudes del sector entre los dos ejercicios también refleja un incremento tras el inicio de la pandemia. Así, a finales de 2021 el conjunto del negocio de las ópticas alcanzó una facturación de 100,99 millones de euros, unos 17 millones más respecto de los 83,9 millones de euros ingresados a finales del primer año de Covid.

La facturación por establecimiento también se incrementó para representar más de 48 millones en los grupos de compra; más de 39 millones entre las cadenas y franquiciados del sector óptico castellanoleonés y más 12 millones de euros entre los establecimientos independientes.

Cabe destacar que en los últimos meses del año pasado y comienzos de 2023, el Consejo General de Colegios de Ópticos-Optometristas ha reclamado la incorporación de esta institución colegial al SACYL -sistema público de salud de Castilla y León-.

De hecho, en una intervención pública, Luis Ángel Merino, decano de COOCYL, denuncia que en otras comunidades sí están incluidos en el sistema de salud pública.

Asegura que pese a ser un sector con una gran empleabilidad y sueldos "acordes a la situación económica actual", en los próximos años se enfrentan a una gran escasez de personal debido principalmente a dos factores: la elevada edad de los actuales trabajadores y la falta de nuevos profesionales.

Según este Colegio, las cifras de los profesionales ópticos en Castilla y León son "preocupantes", ya que entre el 30 y el 40% de sus profesionales tienen previsto jubilarse en los próximos años, "actualmente tenemos a personal trabajando incluso con 80 años".

El presidente de esta institución atribute esta escasez de nuevos profesionales en la comunidad a que no resultan atractivas las salidas, precisamente, por no poder incorporarse al SACYL. Explica que la eficacia de su incorporación a la sanidad pública ya se ha visto en otras comunidades y con ella conseguirían diversificar más la oferta laboral del sector, convirtiéndolo en una opción más llamativa para los jóvenes. Actualmente en la comunidad el 90% de los profesionales se encuentra trabajando exclusivamente en ópticas, cifras que "se reducirían como mínimo un 5% si pudiéramos acceder a la sanidad pública".

Extremadura

En cuanto a la evolución del sector en Extremadura tras la pandemia, la facturación entre 2021 y 2020 pasó de los 33,56 millones de euros a los 40,39 millones de euros. Lo que, siguiendo los pasos de la Comunidad de Madrid y de Castilla y León, también se confirma la recuperación económica tras la pandemia.

En lo que se refiere a la facturación por tipo de establecimiento, los grupos de compra ingresaron a finales de 2021, un total de 19,56 millones de euros; las cadenas y franquicias, más de 15 millones y los negocios independientes poco más de 5 millones de euros. En ese año el número de colegiados ascendió hasta los 324 profesionales y el número de ópticas llegó a las 233.

También se vio aumentado el número de colegiados por cada 100.000 habitantes en esta región pasando de los 26,94 en 2016 a los 30,75 a finales de 2021.