Mientras se agota el primer semestre de 2023 con la vista en saber si los índices de la inflación, que alcanzaron en España una tasa de variación del Indice de Precios al Consumo (IPC) que alcanzó el 3,2% -viniendo de casi un 9% desde finales de 2022-, cerrarán este año en curso por encima del 4 o del 5% como prevén los expertos, a nivel de facturación el sector aglutina buenas noticias en el conjunto de España.

De hecho, en las tres autonomías que van a ser sujeto de este análisis: País Vasco, Navarra y La Rioja, la cifra de negocio entre los ejercicios de 2020 y 2021 son muy positivos. Pero vamos a valorar los datos globales de España en el ejercicio del año pasado, donde sí hay datos globales de conjunto según consultoras privadas.

La conclusión a la que llegan estas consultoras privadas es que los diferentes negocios del sector de la óptica en España siguen incrementando su valor en España. Así pues, en 2022, la facturación del sector en España registró unas ventas de 760 millones de euros, lo cual representa un incremento interanual del 9,4%, según datos recogidos por el Observatorio Sectorial DBK de la compañía Informa.

En el conjunto de la Península Ibérica -es decir incluyendo los datos de ingresos de España y Portugal- el sector de la óptica facturó 965 millones de euros, lo que supuso un alza del 9,7% respecto al año anterior. En el mercado portugués, las ventas del sector incrementaron un 10,8%, hasta los 205 millones de euros. Con el repunte de 2022, el sector ha vuelto a recuperar cifras prepandemia, tras el hundimiento del consumo que se registró a causa de la crisis de la Covid-19. Sin embargo, el informe advierte que prevé una desaceleración del crecimiento y una reducción de las ventas de cara a 2023, debido al impacto de la inflación, que mermará el poder adquisitivo de la población y, por consecuencia, reducirá la contratación tanto de servicios como de productos vinculados al sector óptico en el conjunto de España si la inflación acaba el año 2023 por encima del 4%. Veremos cómo se comportan los precios en el segundo semestre de este ejercicio.

En 2022, operaban en el mercado ibérico 85 empresas dedicadas a la fabricación o importación de productos ópticos, de las cuales 55 tienen actividad en España y 30 en Portugal. En cuanto al empleo, el sector ocupa a unos 4.000 trabajadores, lo que supone una media de 78 trabajadores por compañía.

A cierre de 2022, Euromonitor estima que las ventas de óptica a escala internacional se hayan situado en 142.000 millones de dólares, lo que supone un alza del 20% respecto a 2020, cuando el sector disminuyó un 14% a causa del golpe de la pandemia. La cifra supone recuperar niveles de ventas prepandemia. Con todo, "el sector se enfrenta a la inflación desbocada, la subida de costes y la reducción de gasto de los consumidores, además de retrasos en la cadena de aprovisionamiento y falta de mano de obra", explica la consultora.

Las gafas de sol fueron la categoría más afectada por el golpe de la pandemia, con gran parte de la población encerrada en casa. En 2020, las ventas de este producto se desplomaron un 23%, hasta 16.000 millones de dólares. Además, la incomodidad que supone llevar gafas con la mascarilla puesta también desfavoreció el consumo del sector en 2020. Con todo, al tratarse de un producto vinculado a la salud, la óptica se salvó de echar el cierre durante los meses de confinamiento mientras el resto del comercio no pudo levantar la persiana.

Una de las tendencias que favorecerá el crecimiento de la óptica en los próximos cinco años es el aumento de los digital seniors, personas de más de sesenta años que consultan Internet diariamente y compran online con frecuencia. El grupo es el mayor segmento para el sector de la óptica. "Las compañías necesitan adaptarse y simplificar sus plataformas y experiencias digitales", apunta Euromonitor.

País Vasco

En cuanto al País Vasco, cabe destacar un incremento de la facturación en 2021 respecto del año anterior. Así, el sector óptico vasco aumentó en unos 15 millones de euros su facturación a finales de 2021 en comparación con el año anterior, pasando de los 68 millones de euros a los 82 millones de euros. De éstos, más de 77 millones de euros provinieron de la venta de productos de óptica (gafas y otros accesorios) y poco más de 5 millones de euros a servicios llevados a cabo por los profesionales y colegiados especializados.

Esta comunidad autónoma cuenta con 724 colegiados para un total de 368 ópticas y 6.076 habitantes por cada centro óptico especializado. Y el número de profesionales optometristas se ha incrementado en cinco años desde 2017 hasta finales de 2022, según el INE, pasando de 689 a 724 profesionales de este sector.

En cuanto a las acciones más relevantes de este sector en el País Vasco, cabe destacar en el segundo trimestre de este año la conferencia de Iñaki Elías Pérez, óptico optometrista, portavoz del Consejo General de Colegios de Ópticos-Optometristas (CGCOO) y vicedecano del Colegio Nacional de Ópticos-Optometristas (CNOO), que fue uno de los conferenciantes invitados del Seminario Académico Internacional que se desarrolló durante la celebración del 50 aniversario de la Real Academia de Medicina del País Vasco-Euskal Herriko Medikuntzaren Errege Akademia (REAPV-EHMEA), una institución fundada en 1971 y que cuenta en la actualidad con la presidencia del Dr. Javier Aranceta.

Durante la comunicación presentada y hecha pública tanto por el colegio como por los medios de comunicación por Iñaki Elías en el auditorio Icaza y Aguirre de la Universidad de Deusto, en Bilbao, y que trató sobre el papel del óptico-optometrista en la salud visual en el adulto mayor, subrayó la importancia del óptico optometrista como profesional sanitario de atención primaria, "ya que su profunda formación universitaria le faculta para determinar tanto los problemas visuales refractivos y binoculares, como la detección precoz en sus pacientes de posibles patologías oculares y remitirlos a los especialistas correspondientes, sobre todo en personas de edad avanzada". Y añadió que "el paciente acude sobre todo a las ópticas a revisar su visión, un 47% según las estadísticas del Libro Blanco de la Salud Visual en España 2022, y además la atención primaria en todas las clínicas oftalmológicas privadas del País Vasco la realiza el óptico-optometrista, lo que no ocurre a nivel de la sanidad pública".

Hay que destacar que la especialidad sanitaria con más lista de espera es traumatología y después oftalmología a muy corta distancia -el 27,6% de las derivaciones de pediatría y el 14,6% de las de médicos de familia son a oftalmología, y de estos 3 de cada 4, son por problemas de agudeza visual-, por lo que resulta esencial contar con ópticos optometristas, ya que su labor en la sanidad pública eliminaría este problema y permitiría al oftalmólogo centrarse más en patologías oculares y en la cirugía, reduciendo sin duda las listas de espera en esta área y mejorando el servicio que se le presta al ciudadano.

Navarra

En cuanto a la Comunidad Foral de Navarra también se produjo un aumento de la facturación del sector, pasando de los 22,8 millones de euros en 2020 a los 27,5 millones de euros ingresados a finales del ejercicio de 2021. La comunidad navarra también ha aumentado sus colegiados ópticos optometristas en el período entre 2017 y 2022, pasando de los 178 a los 208 al finalizar el ejercicio del año pasado. Navarra cuenta con algo más de 90 establecimientos ópticos (92).

En cuanto a las noticias relevantes de los profesionales navarros del sector, cabe destacar que los ópticos optometristas han trabajado de forma conjunta con el departamento de Derechos Sociales del Gobierno foral para colaborar en la divulgación de los programas de ayudas y subvenciones públicas, que suman casi tres millones de euros este año.

La idea es que los establecimientos de óptica en la Comunidad foral dispongan de información actualizada y puedan asesorar, orientar y ayudar a "completar la documentación necesaria para que el discapacitado visual, posible beneficiario, conozca y pueda solicitar esos beneficios".

Hay que tener en cuenta que en Navarra se registran casi 2.200 personas con discapacidad visual reconocida y las encuestas oficiales estiman en 9.500 las que reconocen estar afectadas por diferentes tipos de deficiencia visuales, según ha informado el Colegio de Ópticos Optometristas de Navarra, que ha señalado que existe un gran desconocimiento por parte de los pacientes con discapacidad visual y los profesionales del sector respecto a existentes para mejorar la calidad de vida en estas personas.

Tras una reunión y varios cruces de conversaciones y documentos con el departamento de Derechos Sociales, según han informado medios regionales navarros, se ha elaborado una hoja informativa que incluye qué ayudas hay, las distintas convocatorias, qué subvenciona y en qué condiciones. También se incluye qué documentos acompañar y dónde solicitar: en el registro telemático o en los Servicios Sociales de Base.

Este documento informativo "se hará llegar a todos los establecimientos de óptica de la Comunidad foral en formato digital", ha explicado la presidenta del Colegio de Ópticos Optometristas en Navarra, Loreto Mendiluce, que ha agregado que "el departamento, por los canales del Gobierno de Navarra, hará lo propio para que lo tengan en las consultas de Oftalmología, Optometría, Primaria y despachos de Servicios Sociales de Base".

"Hasta ahora la gente nos preguntaba y no sabíamos dar una información precisa: el departamento ha sido sensible, nos ha informado y se ha prestado a orientar para la correcta tramitación de dichas subvenciones", ha subrayado Mendiluce, quien ha destacado que es "algo que también permite que la gente no solicite a destiempo, mal o para cosas a las que no tiene derecho, lo que a su vez colapsa el servicio público y entorpece o perjudica quiénes sí lo necesitan".

En el caso de no tener reconocida una discapacidad visual, un profesional sanitario (especialista médico u optometrista) puede certificar la necesidad de ayudas visuales, y posteriormente el propio servicio de Derechos Sociales lo corrobora previo estudio.

Por otra parte, existen en la actualidad dos convocatorias de Derechos Sociales que afectan a la discapacidad visual. Una es la tradicional, dotada con 30.000 euros. Se trata de la Orden Foral 86/2023 de 14 de marzo de Ayudas a productos de apoyo, autonomía personal y prevención de la dependencia y/o discapacidad. Y por otro lado, hay otra línea dotada con 2,7 millones de euros en 2023, la Orden Foral 134/2022 de 1 de junio de ayudas para productos de apoyo tecnológicos destinados al entorno domiciliario. El Colegio de Optometristas ha destacado también que para este trabajo se ha tenido en cuenta la opinión y la colaboración de las organizaciones de pacientes del ramo en Navarra.

La Rioja

En lo que se refiere a la situación del sector en La Rioja, también se ha producido un incremento de la facturación entre 2020 y 2021. Se pasó de los 10 millones de euros a los casi 13 millones de euros ingresados por el sector en dicho período. En esa comunidad autónoma, el número de ópticos optometristas también se ha incrementado y ha pasado en ese período de 113 a 123, con lo que se demuestra el crecimiento en la actividad económica y en los profesionales colegiados que se dedican en La Rioja.

Como noticia destacada en esta autonomía cabe señalar que un total de once ópticas riojanas a mediados de Junio este año se han sumado a la campaña `Yo no soy un lince´, la cual ofrece a todos los conductores la oportunidad de someterse a un test visual completo sin costo alguno. Esta iniciativa, respaldada por la Dirección General de Tráfico, el Servei Català de Trànsit y la Dirección de Tráfico del Gobierno Vasco, busca concienciar sobre la importancia de tener una buena visión al volante. Correos Express también se ha unido a la campaña al ofrecer esta prueba visual a sus conductores y empleados. Las personas con una visión deficiente tienen tres veces más probabilidades de verse involucradas en accidentes automovilísticos que aquellos que tienen una visión adecuada. Según un estudio realizado, el 2% de los participantes, que se traduciría en aproximadamente 558,900 personas si se extrapolara a la población española, conducen por debajo del límite visual establecido por la ley.

"Cómo es posible que conduzcamos con una visión deficiente? Antes de emprender un viaje largo por carretera, generalmente revisamos que nuestro automóvil esté en perfectas condiciones, pero deberíamos hacer lo mismo con nuestra visión, ya que está en constante cambio. Animamos a todos los conductores a solicitar una cita para realizar el test específico", explica Salvador Alsina, presidente de Visión y Vida. Muchas personas conducen sin tener una visión óptima.