La pérdida auditiva es un problema que no solo afecta a la propia función de oír, sino que influye en diferentes esferas de la vida cotidiana como son las relaciones laborales, sociales y familiares. Por ello, un problema de comunicación generado por no poder oír bien puede derivar en una ...
La pérdida auditiva es un problema que no solo afecta a la propia función de oír, sino que influye en diferentes esferas de la vida cotidiana como son las relaciones laborales, sociales y familiares. Por ello, un problema de comunicación generado por no poder oír bien puede derivar en una serie de consecuencias que merman la calidad de vida de las personas que la sufren. En este contexto, el equipo de audiólogos de Oticon, advierte sobre la importancia de detectar a tiempo los signos de pérdida auditiva y ofrece cinco razones por las cuáles una persona debería revisar su audición por parte de un profesional especializado.
La prevalencia de la pérdida auditiva en España es del 10%, según el último estudio Eurotrack 2023, realizado por diferentes compañías de audífonos. Cuando una persona tiene pérdida de audición ve reducida su capacidad auditiva, de manera que no es capaz de oír tan bien como alguien con una audición normal, considerada ésta dentro de los umbrales de 20 dB o más en ambos oídos. "Para medir esa capacidad auditiva utilizamos la audiometría de tonos puros, que es la prueba de referencia, ya que no solo nos va a ayudar a determinar el tipo de pérdida auditiva (de tipo conductivo, neurosensorial o mixto), sino que resulta imprescindible para decidir la rehabilitación, ofreciéndonos información sobre cómo el sistema auditivo de esa persona procesa los sonidos. Esto nos ayudará a conocer el tipo de solución que necesita cada persona", explica José Luis Blanco, jefe de audiología de Oticon. Lo mejor, por tanto, es que de forma periódica y ante cualquier signo de pérdida auditiva se visite un centro audiológico para hacerse una prueba de audición completa, que es rápida e indolora, con la que determinar el grado y el tipo de hipoacusia.
En caso de sufrir pérdida auditiva lo importante es que la persona tenga claro que existe tratamiento y que el paso más importante es detectarla y rehabilitarla lo antes posible para prevenir males mayores. "Hay que tener en cuenta que la pérdida auditiva nos aísla al hacernos más difícil el poder seguir una conversación. De esta manera, dejamos de acudir a reuniones con amigos o familiares, no participamos en situaciones orales (charlas, conferencias, teatro, etc:) y puede afectar a la memoria y la capacidad cognitiva", subraya Blanco.
Por todo ello, se hace muy importante identificar las señales, especialmente importante en niños y personas mayores porque puede limitar de manera significativa en su calidad de vida. De hecho, según advierte la Organización Mundial de la Salud en su último Informe de la Audición, más del 65% de la población mundial mayor de 60 años presenta algún grado de pérdida auditiva, pero, a pesar de las limitaciones que esto conlleva, esperan entre 9 y 10 años antes de buscar atención audiológica. El equipo de audiólogos de Oticon señala los signos de alerta que indican que debemos revisarnos la audición:
En caso de notar alguna de estas situaciones en algún amigo, compañero o familiar, e incluso en uno mismo, será necesario hacer una prueba de audición.