Investigadores de la Universidad Estatal Stephen F. Austin en Nacogdoches, Texas (Estados Unidos) han utilizado tecnología de secuenciación avanzada para determinar en qué se diferencia la mezcla de microbios presentes en pacientes con ojos sanos de la mezcla encontrada en pacientes con ojo seco. Este nuevo trabajo podría conducir a mejores ...
Investigadores de la Universidad Estatal Stephen F. Austin en Nacogdoches, Texas (Estados Unidos) han utilizado tecnología de secuenciación avanzada para determinar en qué se diferencia la mezcla de microbios presentes en pacientes con ojos sanos de la mezcla encontrada en pacientes con ojo seco.
Este nuevo trabajo podría conducir a mejores tratamientos para diversos problemas oculares y enfermedades que afectan a otras partes del cuerpo.
Las comunidades microbianas dentro y sobre nuestro cuerpo, denominadas colectivamente microbiota humana, desempeñan un papel esencial para mantenernos sanos. Aunque muchos estudios se han centrado en las comunidades microbianas de nuestro intestino, comprender la microbiota presente en otras partes del cuerpo es fundamental para avanzar en nuestro conocimiento de la salud humana y desarrollar intervenciones específicas para la prevención y el tratamiento de enfermedades.
"Una vez que comprendamos adecuadamente la microbiota ocular, mejorará el diagnóstico de la enfermedad en una etapa temprana", comenta la líder del equipo de investigación Alexandra Van Kley, profesora de la Universidad Estatal Stephen F. Austin en Nacogdoches, Texas (Estados Unidos). "Este conocimiento también puede servir como catalizador para desarrollar terapias innovadoras destinadas a prevenir y tratar enfermedades oculares, así como aquellas que afectan el sitio central del microbioma: el intestino".
Pallavi Sharma, estudiante de posgrado en el laboratorio de Van Kley, ha presentado la investigación en Discover BMB, la reunión anual de la Sociedad Estadounidense de Bioquímica y Biología Molecular que se ha celebrado del 23 al 26 de marzo en San Antonio (Estados Unidos). "La investigación del microbioma humano sugiere una fuerte conexión entre el microbioma intestinal, el cerebro y los ojos. Cualquier alteración en el microbioma intestinal afecta a otros órganos y puede provocar enfermedades. Por lo tanto, estamos tratando de identificar patrones de desequilibrio entre los tipos de microbios presentes en el microbioma ocular de una persona con diferentes problemas de salud", explica Sharma.
Para el estudio, los investigadores recolectaron muestras de ojos de 30 voluntarios utilizando un hisopo y luego realizaron una secuenciación de ARNr 16S y un análisis bioinformático para determinar la distribución del microbioma en pacientes con ojos sanos y con ojos secos.
El análisis mostró que las especies de bacterias Streptococcus y Pedobacter eran los microbios más prevalentes en ojos sanos, mientras que había más especies de Acinetobacter presentes en los microbiomas oculares de personas con ojo seco. "Creemos que los metabolitos producidos por estas bacterias son responsables de las condiciones del ojo seco", insiste Sharma. "Estamos realizando más investigaciones para comprender las vías metabólicas asociadas con Acinetobacter para comprender mejor la enfermedad".
Ahora a los investigadores les gustaría explorar el microbioma intestinal de los pacientes con ojo seco para comprender mejor cómo se relaciona con las diferencias de los microbios oculares que observaron.