Elena Serrano ejerce de óptica optometrista en Óptica Rosal 21 de Oviedo y también es mentora en transformación en Óptica Boutique. Desde muy joven, su amor por el diseño, la moda y el arte, sumado a su fascinación por la ciencia y la salud, la llevaron a dedicarse al mundo ...
Elena Serrano ejerce de óptica optometrista en Óptica Rosal 21 de Oviedo y también es mentora en transformación en Óptica Boutique. Desde muy joven, su amor por el diseño, la moda y el arte, sumado a su fascinación por la ciencia y la salud, la llevaron a dedicarse al mundo de las gafas de diseño. Hace 18 años decidió emprender y abrir "una innovadora de gafas de diseño en el norte de España, un concepto poco común en ese momento". "Así nació Óptica Rosal 21, una boutique especializada en diseño y productos de alto valor, que se ha ido posicionando como un referente en el sector. Estoy orgullosa de haber creado un espacio donde la innovación y el diseño se unen para ofrecer un experiencia excepcional a mis clientes". Y no solo eso. Su evolución como óptica optometrista la llevó "a desarrollar un trabajo de mentoría a ópticas que buscan transformarse en ópticas boutiques, respondiendo a la necesidad del mercado español de mejorar la calidad de los productos y atraer clientes de mayor poder adquisitivo".
Óptica Rosal 21 "es una óptica boutique especializada en producto de altísima gama. Gafas de diseño, gafas de autor y las firmas internacionales independientes más punteras. Es por esto que lo que más demandan nuestros clientes es una experiencia global que sea completamente diferente a lo que conocían del concepto tradicional de óptica. Quieren sentirse especiales por la calidad y el diseño de las gafas, y a la vez, quieren pertenecer a un grupo exclusivo de personas que compran un producto de alto valor. Por ello, nuestros procesos de compra están estudiados al milímetro y personalizados al máximo para asegurarnos de que las gafas que compran realmente los represente, reflejando su estilo y personalidad y que, a la vez, la experiencia visual sea única", explica Elena Serrano.
Lo que más valora de su profesión es "la labor tan profunda que realizamos, ya que tenemos la capacidad de intervenir y mejorar la visión de las personas. Al final, solucionar un problema visual es abordar uno de los sentidos más importantes, que nos permite percibir el mundo y nuestro lugar en él, así como interactuar con nuestro entorno", comenta, y añade: "Otra parte de mi profesión que me entusiasma es la venta. Soy una gran apasionada de los procesos de venta, especialmente de alto nivel. Así como ser mentora de ópticas. Es una faceta que también me enriquece profundamente. Acompañar a otros en sus negocios, ayudándolos a crecer y sosteniéndolos en procesos de cambio que pueden generar inseguridad, me hace sentir valiosa. Disfruto observando y apoyando el desarrollo de aquellos que desean avanzar en su profesión".
Respecto a los cambios que ha sufrido la profesión, Elena Serrano considera que "ha experimentado cambios significativos en los últimos años, especialmente en el ámbito de la óptica boutique. Al principio de mi carrera, vender gafas de alta calidad y diseño único era un desafío considerable, ya que el mercado estaba menos receptivo a este tipo de productos. Sin embargo, he notado un cambio en la mentalidad de los consumidores. Cada vez más personas buscan gafas diferentes, considerando no solo su funcionalidad, sino también su estética menos usual". Eso sí, teniendo en cuenta que "atender a un cliente que busca exclusividad implica no solo ofrecer un producto atractivo, sino también brindar una experiencia de compra que refleje el valor y la artesanía de las gafas que ofrecemos. Este enfoque nos permite mantenernos relevantes en un mercado en constante evolución".
Elena Serrano también está contenta con los avances del sector en materia de equipamientos en los gabinetes. Algo que puede llevar a que "los oftalmólogos nos vean como aliados en la detección precoz de patologías, en lugar de como una amenaza". También le fascina hacia dónde se dirige el sector en el futuro. Para ella es importante la irrupción de la inteligencia artificial, que puede ayudar en la comunicación y servicios a los clientes. Así como el futuro brillante que le ve a las ópticas boutique, especialmente las independientes, ya que "la calidad de los productos y servicios que ofrecemos es fundamental para diferenciarnos en un mercado cada vez más competitivo".
Respecto a lo que debería cambiar en la profesión, esta óptica optometrista de Oviedo piensa que "uno de los pasos más importantes que deberíamos dar es establecer un sistema de cobro en todos los gabinetes de óptica en el país. Esto no solo valoriza el trabajo que realizamos, sino que también ayuda a que los clientes comprendan la importancia de los servicios que ofrecemos. Además, es fundamental que los ópticos dejen de avergonzarse de la venta Muchos de nosotros tenemos dificultades para asignar valor a esta parte del proceso, cuando en realidad es crucial para maximizar el impacto de nuestros conocimientos y habilidades".