En el marco del Día Mundial de la Televisión, que se celebra el 21 de noviembre, Oticon se suma a la celebración de este medio de comunicación que ha transformado la forma en la que nos informamos y entretenemos. Esta fecha, establecida en 1996 por la UNESCO, busca reconocer el impacto ...
En el marco del Día Mundial de la Televisión, que se celebra el 21 de noviembre, Oticon se suma a la celebración de este medio de comunicación que ha transformado la forma en la que nos informamos y entretenemos. Esta fecha, establecida en 1996 por la UNESCO, busca reconocer el impacto global de la televisión en la sociedad y promover un uso educativo y responsable. Es precisamente por esto último, por lo que, para Oticon, este día también brinda la oportunidad de reflexionar sobre cómo la televisión y otros medios de entretenimiento pueden afectar nuestra salud, concretamente a nuestra audición.
Así, los expertos de la compañía ponen en alerta sobre uno de los errores más comunes en los hogares españoles: escuchar la televisión a volúmenes elevados. Según el último estudio realizado por la marca en 2024, tan solo un 62,9% escucha la televisión a niveles recomendados. Por tanto, son muchas las personas que no son conscientes de que este hábito puede estar contribuyendo a una pérdida auditiva progresiva. Por ello, desde la compañía se subraya la importancia de cuidar la salud auditiva para garantizar una experiencia óptima al disfrutar de la televisión.
El error silencioso de escuchar la televisión a volúmenes altos
Aunque en general, según este mismo estudio, los españoles son conscientes de los riesgos de escuchar música a través de auriculares a volúmenes elevados (82,9%) o de exponerse a ruidos fuertes en conciertos y discotecas (62,5%), escuchar la televisión a un volumen demasiado alto no se percibe como un comportamiento dañino para la salud auditiva. Además, el 32% de los españoles nunca ha revisado su audición, lo que podría estar ocultando un problema de fondo. De hecho, una de las primeras señales de pérdida auditiva es la necesidad de subir el volumen de la televisión.
Sin embargo, esta práctica no solo empeora la situación de quienes ya tienen pérdida auditiva, sino que además incrementa el riesgo de sufrir daños auditivos irreversibles.
"La falta de conciencia sobre cómo los volúmenes excesivos afectan al oído interno pueden contribuir a un deterioro gradual de la audición. La pérdida de audición relacionada con el volumen elevado de la televisión se da a menudo de forma silenciosa, ya que los síntomas pueden ser tan sutiles que los afectados no se dan cuenta de inmediato", apunta José Luis Blanco, jefe de audiología de Oticon.
¿Por qué es tan dañino escuchar la televisión por encima de volúmenes seguros?
Escuchar la televisión a volúmenes altos puede perjudicar las estructuras del oído, especialmente las células ciliadas en el oído interno, que son esenciales para percibir los sonidos. La exposición continua a ruidos fuertes, como los generados por la televisión a un alto volumen, puede causar un daño irreversible a estas células, lo que lleva a la pérdida auditiva. En muchos casos, los efectos son graduales, por lo que muchas personas no se percatan de que su capacidad auditiva se ve deteriorada hasta que el daño ya es significativo.
Para evitar estos efectos negativos, es importante tomar precauciones al momento de disfrutar de la televisión. A continuación, Oticon presenta algunas recomendaciones para proteger la salud auditiva de los espectadores:
"Desde Oticon queremos destacar la importancia de la prevención y el cuidado auditivo para garantizar que las personas sigan disfrutando de la televisión, la música y todas las actividades sonoras sin comprometer su salud. El Día Mundial de la Televisión nos ofrece una oportunidad para reflexionar sobre cómo pequeños ajustes, como mantener el volumen en niveles seguros y someterse a revisiones auditivas periódicas, pueden marcar una diferencia en nuestra calidad de vida a largo plazo", explica Blanco.