Los especialistas en contactología evalúan la salud ocular y seleccionan la lente de contacto adecuada de acuerdo con las necesidades visuales y anatómicas del paciente. Esta es una rama de la óptica que se enfoca en el diseño, adaptación y cuidado de lentes de contacto para corregir defectos refractivos y ...
Los especialistas en contactología evalúan la salud ocular y seleccionan la lente de contacto adecuada de acuerdo con las necesidades visuales y anatómicas del paciente. Esta es una rama de la óptica que se enfoca en el diseño, adaptación y cuidado de lentes de contacto para corregir defectos refractivos y tratar ciertas condiciones oculares. Y, como no puede ser de otra manera, se encuentra en constante evolución.
La contactología busca corregir la miopía, la hipermetropía, el astigmatismo y la presbicia. Del mismo modo, es esencial en casos más complejos como el queratocono o trasplantes corneales. Antes de adaptar lentes, se realiza un examen completo de la visión y la salud ocular para determinar la refracción, la curvatura corneal y las características anatómicas del ojo. También se evalúa la cantidad y calidad de la lágrima, crucial para evitar complicaciones y garantizar comodidad. Los optometristas especializados en contactología tienen que estar en continua formación, ya que juegan un papel crucial en la selección y adaptación de lentes de contacto para diversos casos.
Esta especialidad es esencial en la prevención de complicaciones relacionadas con el uso inadecuado de lentes y en el manejo de condiciones oculares especiales. Cada paciente requiere un diseño y ajuste específicos según su condición ocular, estilo de vida y necesidades visuales. Es por ello que cada vez se dispone de más diseños y materiales para dar una solución individualizada a los pacientes. Por otro lado, la contactología implica educar sobre la correcta limpieza, desinfección y almacenamiento adecuado de las lentes para prevenir infecciones y maximizar su vida útil.
En lentes para la presbicia, para el control de la miopía, esclerales o lentes para pacientes con sequedad ocular es donde más se está avanzando en los últimos años.
Una elección correcta
Siempre es fundamental acudir a un contactólogo para determinar la opción más adecuada según el perfil visual y las necesidades específicas de cada persona. La elección de las lentes de contacto más adecuadas depende de varios factores relacionados con el estilo de vida del paciente, su condición ocular y sus preferencias personales. Es decir; debe basarse en una combinación de comodidad, salud ocular y estilo de vida, para asegurar una corrección visual efectiva y cómoda.
Ante un estilo de vida activo, las recomendadas son unas lentes de contacto blandas y permeables al gas (RGP). No hay que olvidar que son ligeras, cómodas y estables, lo que las hace ideales para quienes realizan actividades físicas o deportes. Son resistentes al impacto y ofrecen una visión clara sin el riesgo de que se caigan, como las gafas. Las lentes RGP pueden ser útiles para corregir problemas más complejos de visión, como el astigmatismo o el queratocono.
Por su parte, las lentes hídricas o de silicona-hidrogel permiten que el ojo respire mejor, lo que puede ser importante para quienes realizan actividades físicas durante largos períodos.
Para el trabajo frente a pantallas, o uso intensivo de dispositivos electrónicos, lo recomendable son las lentes multifocales o progresivas, ya que pueden ser útiles para quienes necesitan corregir tanto la visión de cerca (lectura) como de lejos (pantallas). Además, para quienes pasan muchas horas frente a pantallas, las lentes de silicona hidrogel, de alta hidratación, ofrecen mayor comodidad al permitir una mejor oxigenación de la córnea. Por otro lado, es tendencia que las personas que usan dispositivos electrónicos durante mucho tiempo pueden beneficiarse de lentes con protección contra la luz azul para reducir la fatiga ocular.
Puedes leer el artículo completo en el PDF adjunto.