IM OPTICAS nº 11

13 sabiendo que los sistemas públicos de salud de estos territorios son muy frágiles, es apoyar en la dotación de equipos y en la formación de profesionales”. En el tema de la óptica, “si bien hay algunos países que cubren la consulta, no cubren las gafas”. Por ejemplo, “en Mali tenemos una parte del proyecto que es formación a mujeres para que arranquen sus propios pequeños negocios y así puedan tener unos pequeños ingresos para que cuando hayan problemas de salud en la familia puedan abordarlo, porque el sistema de salud no es 100% gratuito, hay una parte de copago”. Esa es la idea: “Sin sustituir a las instituciones públicas, porque su deber es atender a la población, apoyarles para que tengan más capacidad o vaya aumentando su capacidad para atender a su propia población local”. En cuanto a los principales retos del sector óptico en la actualidad, Barba comenta que en los territorios donde trabajan, “lo primero es sensibilizar a la población sobre la importancia de la salud ocular”, por lo que “hay toda esa parte de prevención y sensibilización”. De hecho, remarca, “muchas veces hay bullying en las escuelas a los niños que llevan gafas”, así que hay que“trabajar para explicarles que al final es una necesidad que tienen, que les permitirá poder estudiar mejor y que, al contrario, les tienen que animar a que se pongan esas gafas, porque irán bien para su futuro”. Y en ese sentido también se apoyan en los maestros de las escuelas, “que son quienes también pueden detectarlo”. Primero, “que esos niños que no ven bien” y, una vez tienen las gafas, “animarles a ponérselas”. En cuanto a la perspectiva de futuro a largo plazo de Ojos del Mundo, “ojalá no hubiese ceguera evitable y que nuestro reto ya estuviese asumido”, reflexiona. “Nosotros formamos parte de la Agencia Internacional de Prevención de la Ceguera (IAPB) y los estudios que han publicado exponen que actualmente hay 1.100 millones de personas que viven con baja visión por el hecho de no tener acceso a los servicios de salud ocular”. El mismo estudio dice que el 90% de la pérdida de visión es prevenible o tratable. “Frente a estas grandes cifras, nuestra perspectiva es que hay mucho trabajo todavía por hacer”. Actualmente trabajan en cuatro territorios. En este sentido, están valorando en estos países extenderse a otras zonas “donde hay también población vulnerable e ir incorporando herramientas de telediagnóstico y de teleformación que nos permiten con menor coste tener más impacto y seguir fortaleciendo estos servicios públicos de salud para que puedan en un futuro ser autónomos y sostenibles”. En definitiva, resulta imprescindible “sensibilizar a la población de nuestro entorno de cuál es la realidad de esos territorios y de que realmente la ceguera evitable tiene un alto rendimiento, una operación de cataratas no es una operación compleja ni tampoco es una operación de coste elebado”. De hecho, tienen estimado que cuesta unos 100 euros, lo que supone “una inversión muy pequeña”. Sin embargo, el impacto que puede tener es inconmensurable, ya que “no solo es curar esa catarata, es que esa persona pueda seguir estudiando o pueda seguir trabajando”. Pocas cosas en la vida “cuestan tan poco y tienen un impacto tan grande, especialmente para las poblaciones vulnerables”. Si estás interesado en colaborar con la Fundación Ojos del Mundo, puedes encontrar toda la información en www.ojosdelmundo.org. “HAY 1.100 MILLONES DE PERSONAS QUE VIVEN CON BAJA VISIÓN POR EL HECHO DE NO TENER ACCESO A LOS SERVICIOS DE SALUD OCULAR”

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