IM OPTICAS nº 2

49 Pausas para descansar los ojos Sin embargo, de poco sirve seguir todas esas indicaciones ergonómicas si no se acompañan de otras pautas importantes. Lo ideal sería realizar pausas de forma habitual cada hora u hora y media. Descansar la vista en pausas de cinco minutos, alternando la visión de objetos cercanos y lejanos, lo que contribuye a relajar los ojos. Otra buena opción es la regla 20/20/20. Cada 20 minutos apartar la mirada del aparato electrónico, durante 20 segundos, mirando a un lugar u objeto situado a una distancia de 20 pies, es decir, unos seis metros. Ello relaja la musculatura ocular y ayuda a reducir la fatiga visual. También es conveniente cerrar los ojos y taparlos con las manos de forma suave durante unos segundos, lo que contribuye a reducir la sequedad ocular. Al igual que parpadear con más frecuencia. Una persona adulta parpadea una media de 20 veces por minuto, pero ello se reduce a 12-16 veces por minuto al leer, y a 3-4 vece por minutos al estar frente a un ordenador con lo que se reduce la producción de lágrima, empeora su distribución regular sobre la córnea y se favorece su evaporación. ojo seco, cambios en la graduación óptica, lagrimeo, fatiga visual y molestias musculares. Todas estas sensaciones pueden acentuarse por la presencia de una disfunción visual no diagnosticada o por una graduación desfasada de las gafas, afectando al rendimiento académico y laboral. Importancia de la ergonomía visual El uso cada vez más elevado de dispositivos electrónicos de visualización y cómo nos enfrentamos a ellos condiciona nuestro día a día y, por ende, la salud de nuestros ojos. Por ello, es importante mejorar la ergonomía visual. Unos pocos consejos pueden ayudar. Como utilizar una iluminación adecuada, tener una buena postura frente a las pantallas, variar de vez en cuando el enfoque de la visión, evitar los reflejos y deslumbramiento de las pantallas, parpadear con frecuencia e incluso levantarse cada cierto tiempo para cambiar la perspectiva, por ejemplo. El ambiente de la habitación es primordial. El espacio debe estar bien aireado y a una temperatura normal. Los muebles deben ser los adecuados, con una silla a poder ser regulable en altura y una mesa que facilite tener una postura corporal adecuada para estar más relajado y tener una menor tensión visual. Lo ideal sería que la mesa tuviera una inclinación de unos 20 grados, pero si ello no es posible, es bastante útil disponer de un atril, que se situará cerca de la pantalla a la misma distancia de visión.

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