69 Cuidado de nuestra salud auditiva Más allá de las peticiones a las administraciones, en nuestro día a día podemos aplicar algunas recomendaciones para cuida nuestra salud auditiva. Gestos sencillos que ayudarán a prevenir de manera individual la pérdida auditiva. Los expertos señalan que el ruido es uno de los factores más importantes para la pérdida auditiva, enfatizando en la conexión directa entre la contaminación acústica de las ciudades y la pérdida de audición en un 64% de los casos. En Europa, 12.000 personas fallecen cada año por problemas de salud derivados del ruido, y más de 100 millones están expuestas a niveles que perjudican seriamente su salud. Por ello, debemos incentivar la protección auditiva en ambientes ruidosos, evitar la exposición al ruido y limitar el uso de auriculares, regular el volumen de los aparatos electrónicos, dejar descansar los oídos de vez en cuando escuchando el silencio, limpiarlos con agua y jabón en lugar de bastoncillos, utilizar tapones y secarlos bien al realizar deportes acuáticos, cuidarlos cuando tengamos catarros o gripes, y a la menor señal de pérdida auditiva, acudir a un especialista. Más del 5% de la población mundial, 466 millones de personas, viven con discapacidad auditiva, Y solo en España, la pérdida auditiva o hipoacusia afecta a un 8% de la población, lo que supone un importante condicionante para su calidad de vida. Oír peor es vivir peor. La buena noticia es que el 90% de los casos tienen solución, siempre que se reaccione a tiempo. Muchas pérdidas auditivas pueden ser rehabilitadas con el uso de audífonos o, en el caso de no ser suficiente, mediante implantes de oído medio o cocleares. Aunque, por el momento, ninguna terapia ha conseguido erradicar la sordera o impedir el deterioro auditivo. Avances en audiología A pesar de ello, hay avances. En los últimos años, el avance de la tecnología ha permitido resolver muchos problemas de audición para los que antes no había solución. No hace tanto tiempo, los aparatos para la personas con dificultades auditivas eran escasos, caros y en muchas ocasiones muy incómodos, por lo que muchos usuarios renunciaban a ellos. Sin embargo, la miniaturización de los productos y los avances técnicos han reducido su coste y han supuesto una mejor usabilidad. Pero eso no es todo, investigaciones recientes se centran en el papel que juega el cerebro en nuestra audición o la llamada BrainHearing (escucha cerebral). La tecnología asociada a este término consiste en un audífono que aprovecha el poder del cerebro para logra una mejor comunicación. Se basa en un algoritmo de separación de voz que puede reconocer una sola voz y amplificarla. Un gran avance si tenemos en cuenta que los audífonos actuales amplifican el sonido y son capaces incluso de suprimir ruidos de fondo, pero no aumentan el volumen de una voz individual. En los casos de daños demasiado graves, ampliar el sonido con un audífono tradicional no sirve de nada. En estos casos, se opta por el implante coclear que envía la señal directamente al nervio auditivo, evitando las zonas dañadas del oído. Los implantes captan el sonido, lo procesan y por medio de la electrónica estimulan el nervio auditivo. Curar la sordera todavía está lejos de conseguirse. Sin embargo, los estudios clínicos se están multiplicando internacionalmente y se espera un cambio de paradigma en los próximos años. Hay tres tipos de investigaciones terapéuticas sobre la sordera que figuran actualmente en el Registro Internacional de Ensayos Clínicos que se realizan en todo el mundo. Por un lado, una investigación centrada en la protección del oído interno frente al uso de fármacos o sustancias cuyos efectos secundarios perjudican el funcionamiento de la audición. Una segunda investigación centrada en reactivar la regeneración de las células ciliadas cocleares dañadas. Y una última vía de terapia génica consistente en reintroducir una parte del genoma en las células ciliadas para que puedan sintetizar la proteína que les falta para su correcto funcionamiento. En 2050, casi 2.500 MILLONES DE PERSONAS convivirán con algún grado de pérdida auditiva Al menos 700 MILLONES DE PERSONAS requerirán de servicios de rehabilitación Fuente: OMS
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