IM OPTICAS nº 8

11 Juan Almagro Coco Project Lobster (Madrid) Juan Almagro Coco es óptico optometrista y director de tienda de Project Lobster en Madrid. Tan solo lleva cuatro años en el sector, en el que empezó como “optometrista raso”, como él mismo define, y actualmente es el responsable en “una gran empresa que no para de crecer”, afirma. Se hizo óptico optometrista porque considera que “la vista es el sentido más importante que poseemos y tenerla bien graduada es indispensable para disfrutar al 100% de los detalles de la vida”. En ese sentido, quizás es por ello que lo que más valora de su profesión es “la satisfacción de devolver la visión a quien lo necesita. Así como la reacción de felicidad de las personas cuando vienen a por sus gafas y vuelven a ver mejor”, constata. Unos clientes que lo que más demandan son “productos de calidad a precios asequibles”, según Juan Almagro. Ahí es donde entra su profesionalidad, proporcionando además “a cada cliente una experiencia de óptica única. Nuestra prioridad es dar un servicio de calidad, honesto y cercano. De principio a fin”, comenta. Tanto es así que, en su día a día, se ha encontrado con anécdotas curiosas como la de “una señora, algo mayor, que entró en la óptica diciendo que en el hospital le habían dicho que tenía cataratas y le habían dado cita para dentro de muchos meses. Así que vino pidiéndome que si yo podía operarla en menos tiempo”, explica. Respecto a los cambios acaecidos en la profesión en los últimos años, Juan Almagro cree que, “como en todos los sectores, la tecnología ha hecho mucho. A medida que han pasado los años han mejorado desde las máquinas que utilizamos para graduar, hasta las que utilizamos para pedir las lentes o recortarlas”. Como ejemplo, habla de los autorefractómetros, señalando que “cada vez son más precisos y dan resultados más fiables a pesar de ser objetivos”. Y las biseladoras, “pasamos de recortar y retocar las lentes manualmente, a hacerlo todo de manera automatizada”. También constata algunos cambios en los clientes, en referencia a la percepción que tienen de los ópticos optometristas tras la pandemia. Este óptico optometristas de Madrid considera que “las personas están más preocupadas por su salud visual a raíz de haber pasado mucho tiempo en casa por el confinamiento y el teletrabajo, teniendo que ‘forzar’ más la vista”. Es por eso que cree que en el futuro el mundo de la óptica debe dirigirse “hacia una mayor protección de nuestra visión, debido al aumento del uso de dispositivos electrónicos. También debido a un uso abusivo de estas tecnologías a edades cada vez más tempranas”, señala. Afirmando con rotundidad que “nos espera otra pandemia, la de la miopía”. En relación a los cambios que debería haber en la profesión, Juan Almagro es claro al señalar que “no debería desprestigiarse nuestra labor y la importancia de nuestros productos. Hoy día, las grandes multinacionales cada vez venden gafas más baratas y están obsesionadas con vender más y más, sin tener en cuenta que somos sanitarios y no comerciales. Sí que es cierto que nuestro trabajo tiene una cierta labor comercial, pues saber vender es clave para ganar dinero. Pero también se debe valorar la experiencia de compra y el trato al cliente como profesional de la salud visual, sabiendo que lo que llevas en la cara es de buena calidad, no solamente barato”. ““TAMBIÉN SE DEBE VALORAR LA EXPERIENCIA DE COMPRA Y EL TRATO AL CLIENTE COMO PROFESIONAL DE LA SALUD VISUAL, SABIENDO QUE LO QUE LLEVAS EN LA CARA ES DE BUENA CALIDAD, NO SOLAMENTE BARATO”

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