IM OPTICAS nº 8

48 OFTALMOLOGÍA AL DÍA La oftalmología andaluza ya puede aplicar la medicina basada en los resultados en salud. Un proyecto del Servicio Andaluz de Salud (SAS) puso en marcha a principios de febrero este pionero programa que se extenderá a todos los hospitales de la autonomía y a través del que los especialistas pueden ir agregando información a un banco de datos común que permitirá “mejorar la eficiencia”, señala Ignacio Montero de Espinosa, director de Relaciones Institucionales de la Sociedad Andaluza de Oftalmología (SAO) y director médico en el Área de Salud Ocular (Sevilla), que argumenta: “Con el mismo gasto o menos, vamos a conseguir mejores resultados”. Además, esta metodología de trabajo facilitará el llevar un “seguimiento estrecho” de cada paciente con “tratamientos mucho más finos y adecuados” y efectuar algo impensable hasta hace unas décadas, como valorar a grandes grupos de pacientes. “Ahora tenemos la posibilidad de hacer la medicina basada en resultados”, anuncia el oftalmólogo. Es decir, poder analizar “miles, millones de datos” con arreglo a lo que exige la legislación para, por ejemplo, el desarrollo de vacunas. Y, en el caso andaluz, aterrizarlo hasta la consulta oftalmológica. “Hoy está todo el mundo convencido de que la medicina debe estar basada en datos reales de lo que está ocurriendo”, refuerza. “Hoy todo el mundo está convencido de que la medicina debe basarse en datos reales” ANDALUCÍA SE CONVIRTIÓ A PRINCIPIOS DE AÑO EN LA PRIMERA COMUNIDAD AUTÓNOMA EN IMPULSAR EN TODOS SUS HOSPITALES UN PROYECTO HOMOGÉNEO DE MEDICIÓN DE RESULTADOS EN SALUD EN OFTALMOLOGÍA, QUE PERMITIRÁ UNA MAYOR EFICIENCIA DEL SISTEMA SANITARIO. EN UN COMIENZO, ABORDARÁ SEIS DE LAS PRINCIPALES PATOLOGÍAS QUE CAUSAN CEGUERA EN LA POBLACIÓN. De ahí que la base de datos, en marcha desde enero, “sigue creciendo”. En la actualidad se han definido las variables para el glaucoma, el edema macular diabético, la degeneración macular asociada a la edad, la oclusión venosa de la retina, la miopía magna, y la patología hereditaria de la retina, aunque Montero de Espinosa adelanta que tienen intención de ampliarlo “a prácticamente todas las patologías oftalmológicas” e, incluso, que se extienda a otras especialidades. “La convicción de los médicos es absoluta, y de los pacientes que son casi los que más nos han empujado a través de las asociaciones de pacientes, también”, reconoce. No obstante, anima a coordinar a “todos los profesionales” de Oftalmología, a los ópticos optometristas e incluso a las farmacias, porque “es muy importante que conozcan” y se acostumbren a utilizar este banco de datos. “El pequeño esfuerzo que supondrá cambiar el hábito, en cuanto a recoger datos, nos va a compensar enormemente”. Hacia una detección precoz Por sí sola, la base de datos que se implementa en el programa Diraya (el que utilizan todos los sanitarios del SAS) no hará, en el corto plazo, que la detección de ciertas patologías sea más Ignacio Montero, director de Relaciones Institucionales de la Sociedad Andaluza de Oftalmología

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